Stratigraphy of SPAIN and beyond - history, monuments, ideas, arts & crafts

viernes, 26 de noviembre de 2010

Mosaicos en la gran Mezquita de Córdoba

El califa hispanoomeya al Hakim invito artesanos bizantinos para colaborar en las obras de su ampliación de la gran Mezquita de Córdoba. Los mosaicos abajo son un testimonio precioso de esta traspaso de "know-how" desde un extremo del Mediterráneo al otro.


Fotos: László Béla Kovács, 2009

























Otras entradas sobre cultura hispanomusulmana:

jueves, 18 de noviembre de 2010

JAUME VICENS VIVES - el poder transformador de la dignidad intelectual



He acabado de ver el documental que ha emitido la 2 sobre Jaume Vicens Vives; me sueno el nombre de libros, pero hasta ahora no tenía conciencia decente de esta persona singular y su rol profundo en la renovación de digamos el "espíritu español". Acabado la programa he encendido mi ordenador para Googlearlo: Curiosamente en la Wikipedia castellana viene solamente un parrafito corto sobre el; por otro lado la versión catalana es muy extensa... De eso concluyo que la conciencia masificada del internet reconoce su labor por la causa Catalana, pero no su significado para la sociedad Española en la totalidad. Una búsqueda rápida adicional me ha dado este texto inteligente que recomiendo. A continuación permíteseme un repaso "impresionista" de mis asociaciones impulsadas por la programa recién vista.



"Yo me quedo" - el non-exilio: Un amigo húngaro cercano me ha contado una memoria de su infancia en Hungría en 1956: Cuando ya se veía regresar a las tropas rusas, su tío decidió por la emigración. Toda la noche anterior, el padre de mi amigo estaba paseando arriba y abajo en el pasillo, y por la mañana decidió no ir. El y un serie de intelectuales húngaros hicieron conscientemente la misma decisión que Vicens Vives escasas dos décadas antes en el otro lado del continente. Comprendo que el abandono de la patria por los exiliados (tanto españoles como húngaros) debe de haber sido durísimo, pero creo que en general se habla demasiado poco sobre los que tras una posible elección obedecían a un otro imperativo interior, el de quedarse.



Por razones obvias no se pueden proyectar los digamos condiciones de trabajo de Vicens Vives en el presente; La sociedad Española de la posguerra (1940-50) y el de ahora (2010) tiene una larga serie de diferencias profundas. No obstante si consideremos su labor como hombre, intelectual y político bajo el foco de: Aquí donde estoy (lugar+tiempo) ¿cuáles acciones tienen más sentido, quedando fiel a mis coordenadas internas?; podemos preguntarnos exactamente lo mismo ahora, cada uno esté donde esté. Y su camino de aquel entonces tiene absoluta validez hoy; lo formularia así: 1) Una "lucha" es perfectamente posible sin banderas, bramidos y litronas. 2) si me meto bien en "el lodazal politico" es por conseguir lo que realmente me importa en todos los dimensiones. 3) después de algún tiempo en la arena no solo que puedo seguir mirándome los ojos en el espejo, sino he conseguido que algunos de los otros jugadores quizás también serán mas capaces de hacer lo mismo debido a mi aportación.



Contemplando la panorama actual de la vida pública (Española, Europea y mundial...) este comportamiento aparentemente tan sencillo brilla por su ausencia...



La dignidad intelectual de Jaume Vicens Vives es pues un resplandor que atraviesa los tiempos, me parece un modelo realmente glorioso de seguir.

martes, 9 de noviembre de 2010

Donde se acaba Madrid: Las Herreras

Entre todos los diferentes tipos de fronteras que hay, tenemos las claramente demarcadas por un río o un línea de montañas altas. Luego están los que únicamente existen gracias a un cartel. Un tercer tipo es tirando a "místico": no puedes poner el dedo en la línea natural, pero tienes el sentimiento pronunciado de estar allí donde algo se acaba... Las Herreras es un lugar así.

Pasado El Escorial, el camino hacia Ávila sube por el Puerto de la Cruz Verde. Una vez subido por todas las curvas, mirando atrás tenemos una impactante vista del monasterio en su totalidad desde arriba; en el horizonte se elevan las torres de Madrid. El ultimo pueblo madrileño en esta carretera es Santa María de la Alameda, pasado lo cual sigue Navas del Marqués, con que ya se esta en la provincia de Ávila. Desviándose de la carretera principal también se puede pasar entre los dos antedichos pueblos por caminitos enanos donde apenas caben dos coches; por estas se llega al protagonista de la entrada de hoy.

Administrativamente Las Herreras pertenece a Santa María, pero físicamente esta mucho más cerca de Navas, o sea es el ultimo poblado de Madrid en la zona. La aldea esta rodeado por un paisaje agreste, donde el terreno sube y baja de manera irregular en todas las direcciones. Como testimonio del uso como pasto, muchas de las laderas estan meticulosamente parceladas con vallas.

En el puñado de casas viven entre semana aprox. diez personas, sobre todo en las casas nuevas en la periferia. El núcleo esta formado por un conjunto precioso de casas antiguas de piedra, la mayoría parecen ser deshabitadas pero no abandonadas de todo. Los pueblos de la sierra de Madrid estaban ataño todas formadas por este tipo de arquitectura, pero en las ultimas décadas se les han cargado en la gran mayoría de ellos. Es paradójico pensar que ahora con el crisis de los materiales, es un lujazo impensable para alguien de la clase media construirse una casa de estas caracteristícas, que en su momento eran hechas y habitadas por personas de un nivel social muy humilde.

No hay ni una sola tienda en Las Herreras, pero hay un bar/restaurante donde sirven una comida excelente.































lunes, 25 de octubre de 2010

La hermandad desconocida entre España y Hungría (1)


Era el 3 de noviembre del año 1527 cuando el obispo de Nyitra colocó la corona húngara en la cabeza de Fernando de Habsburgo en la ciudad Székesfehérvár, convirtiéndole en el rey Fernando I de Hungría. El puesto le tocaba por estar casado con la hermana del rey anterior, Luis II de Hungría, recién fallecido sin descendencia. Fernando inicio la serie de Habsburgos en el trono, donde su casa perdurara hasta la primera guerra mundial en principios siglo XX cuado se acaba la monarquía en dicho país. 
Producto de decisiones de la alta política en su poderosísima familia (es el hermano de Carlos V!), la sangre en las venas del joven rey era una mezcla de múltiples rincones de nuestro continente, pero si la nacionalidad se mira según lugar de nacimiento, idioma materna o entorno de crecimiento no hay ninguna duda: era español. Nació en Alcalá de Henares en 1503 y fue educado en Castilla bajo la protección de su abuelo materno: Fernando el Católico.
La corona ahora colocado en su cabeza es una obra maestra de la orfebrería medieval, de oro macizo y ricamente decorada con piedras preciosas a parte de delicadas esmaltes miniaturas retratando santos y reyes; como objeto sigue siendo la suprema expresión material de la identidad nacional de todos los húngaros hasta hoy mismo, aunque ya no exista la monarquía. El lugar de la ceremonia es también lo habitual según los tradiciones del país. Lo problemático empieza a asomarse si miremos el clérigo liderando la coronación: en lugar del antedicho obispo debería haber sido el arzobispo de Esztergom. Pero no puede ser, porque ha acabado de morir… junto con siete obispos, 28 miembros de la alta nobleza, más de 15 mil soldados, además del antedicho rey Luis II. El catástrofe cuya sombra espesa oscurece la ritual solemne es la famosa batalla de Mohács el año anterior, agosto de 1526, donde se enfrentaron 25.000 húngaros mal organizados con una suprema potencia militar de la época, 60.000 turcos bajo el liderazgo del enérgico caudillo Solimán. Además del baño de sangre espantosa, la derrota devastador abrió camino directo a la toma de Budapest e inicio la presencia amenazadora turca en el corazón de Europa durante el siguiente siglo y medio. 
Y la lista de malas noticias todavía no se ha acabado para el recién coronado complutense. Un año antes la misma corona y el mismo obispo han participado ya en una coronación, el de Juan Szapolyai – que sigue vivo… y no ha renunciado en absoluto al trono, solo que la persona que tenia encargado de vigilar el en todos sentidos valiosísimo objeto de orfebrería le ha traicionado. 
Resumiendo la situación: recibir la corona húngara en tales circunstancias era un honor dudoso. Significaba para Fernando I una vida entera de enfrentamientos bélicos, si no con los turcos entonces con los húngaros del otro bando; luego el apoyo que recibió de su hermano Carolos V tampoco era de todo tan glorioso como podría haber sido; pero nuestro Habsburgo español ha trabajado duramente a lo largo de casi 40 años para hacer lo que se ha podido…
(el ensayo se continuará)

sábado, 16 de octubre de 2010

Mándala Visigoda en Placa Estampada


Cultura del reino visigodo hispánico (2)

- Interpretando cosmología paleocristiana -
















La placa decorada de arcilla roja en la foto tiene 27x36cm y procede de la aldea de El Hoyo, Belméz, unos 70 km. NO de Córdoba ciudad. Se ve expuesta en la colección permanente del Museo Arqueológico de Córdoba (1)


También llamados ladrillos estampados, se han encontrado objetos de este tipología en diferentes puntos de Andalucía, procediendo de los siglos IV-VII d.C. es decir época romana y visigoda. Su uso exacto es todavía debatido, pero la sugerencia de A. Caro Bellido (Universidad de Cádiz) me parece probable:

Los fragmentos de Lebrija, y otros con caracteres similares, definidos por presentar dos bandas lisas en los lados menores del rectángulo, por tanto, paralelas entre sí, denominadas tabicas, sirvieron para adornar la techumbre de una estancia supuestamente laica, rellenando el espacio existentes entre las vigas de madera, a modo de casetones, en lo que sigue un sistema llamado en términos generales de “ladrillo por tabla”; las tabicas descansaban en la vigas mientras que la decoración en relieve quedaba vista, creándose así un bello contraste, sin duda acentuando gracias al hecho de que los motivos estuvieron pintados a base de agrama u óxido de hierro” (2)

Otros autores creen en un uso funerario de las placas, no obstante el contexto del hallazgo en el Hoyo ha sido como los citados de Lebrija: entre restos arquitectónicos.

La simbología del motivo

Ojeando los artículos entre las referencias abajo, sobre todo (4), se ve un gran repertorio de diferentes motivos sacados con la técnica de estampilla. Algunas de los más sencillos se pueden quizás cualificar como meramente decorativas, la repetición cuatro veces siendo un derivado directo del forma cuadricular. Sin embargo mirando al casetón de el Hoyo el espectador se topa inmediatamente con uno de las imágenes paleocristianas más conocidos: la paloma. Que tengamos dos de ellos cruzadas no es nada típico, y aumenta más aún la sensación de tener todos los detalles de la superficie cargado de sentido simbólico.

La primera descripción publicada en 1919 poco después del hallazgo por Enrique Romero de Torres propone ya una interpretación:
“ (...) aparece dentro de un rectángulo cuadrado un círculo en cuyo centro se ven dos palomas enlazadas en forma de cruz, uniéndose a la línea de la circunferencia los vástagos de cuatro hojas de yedra o de corazón y el espacio que media entre cada una de ellas está ornamentado con pequeños adornos semejantes a una estrella o flor cuadrifolia.
El simbolismo cristiano de esta baldosa, (…) resulta interesante; pues las palomas cruzadas dentro del círculo parecen representar el Amor Divino y Eterno, y las hojas de yedra, cuyos vástagos van unidos á la circunferencia,
el amor terrenal que nace de aquél y la unión de ambos amores, el amor humano con el amor de Dios.
" (3)

O sea se trata de un especie de mapamundi espiritual expresando la relación ente Dios, el hombre y el mundo; de aquí el título del presente ensayo: La palabra mándala, literalmente "circulo" en sánscrito, significaba originalmente imágenes geométricas multicolores, utilizadas en el hinduismo/budismo. Parcialmente debido a C.G.Jung, en el ultimo medio siglo la palabra ha ganado acepto en algunas sectores de la cultura occidental para designar una representación gráfica del universo en general, desde la perspectiva humana y normalmente exhibiendo alto grado de simetría. Se trata pues de una herramienta visual, una ayuda al mente para meditar, y como tal ha existido independientemente en casi todas edades y culturas, también en Europa. Lo único es que aquí no tenia designación propia, por eso hemos importado la palabra mándala. ¡Pero ojo! siendo prestado la palabra, no hay necesariamente una connotación de cultura co-importada del Sureste Asiático… prometo que se puede seguir leyendo sin peligro de encontrarse de repente con la teoría "Jesucristo en la India".

Lo que si considero necesario son algunas pasos adicionales en la digamos desempaquetación y actualización del mensaje en el casetón, sobre todo respeto a los cuatro “estrellas” entre las hojas, a los que la ficha técnica del museo llama “astas”. Su significado me parece clave, sin embargo no me suena haberlos visto descifrados explícitamente por ninguna parte. Pero antes repasaré los otros elementos intentando meterme en la visión del hombre tardoantiguo/medieval, sin perder de vista mi propia contemporaneidad.

Contemplando la placa, entre todas las partes del motivo lo mas dominante es el circulo central; su trazo es lo que es lo mas grueso por lo tanto lo que mas resalta y salta a la vista. La perfección del círculo expresa unánimemente lo divino – sinónimos de lo cual son lo celestial, lo eterno y el absoluto; a unos les gustara más una palabra que otra, según disposición individual hacia terminología religiosa o filosófica. Es lo bueno que poseen los símbolos: en nuestro contacto directo con ellos no tienen porque intervenir palabras… solo en el momento que nos ponemos a hablar sobre ellos. El hecho que el trazo del circulo sea lo mas marcado indica que para el hombre de antes la existencia de lo divino era lo más claro, lo más lógico - mucho más que cualquiera otra cosa. Y no por piedad o falsa moralidad, simplemente veían el mundo así. “Lo extraordinario no es que haya un Dios. Lo extraño es que exista cualquier otra cosa en el mundo que Dios.” (5)

La paloma es arcaicamente un símbolo del espíritu santo, luego de la sencillez evangélica (6); de todos modos algo central y esencial en lo divino. A modo que una pequeña “x” marca el punto céntrico de un circulo geométrico, las dos palomas cruzadas forman aquí el centro, digamos “la quintaesencia” del circulo de la eternidad / divinidad / celestialidad.
Salen cuatro hojas con forma de corazón hacia las esquinas, las bordes externas dibujando las esquinas de un cuadrado – forma que se acentúa con las líneas del marco. Cual era la simbología de esa forma? Pues “durante la Antigüedad y la Edad Media, el cuadrado fue considerado como el símbolo de la Tierra, por oposición al Cielo; es el símbolo del universo creado.” (7) Añadiría que el cuadrado/rectángulo también me parece un símbolo adecuado y actual de lo creado en general, aunque sea por el hombre. Una hoja de papel, la pared de una casa, un cuadro, una pantalla… son todos elementos con dos y dos lados paralelos; es la forma mas clara e inmediata para la mente humana cuando necesita manejar un pedacito de espacio.

La forma acorazonada de las hojas ha conducido Romero de Torres en su interpretación “amor terrenal”; yo daría aquí un significado mas amplio, considerando la imagen simplemente como cuatro plantas.

Permítanme aquí un ligero digresión al campo de la lingüística. La palabra “planta” es idéntico en todos los idiomas indoeuropeas (español, ingles, alemán etc) viniendo de latín, "donde se referiría al parte del pie que toca al suelo. Plantar (del verbo latín “plantare”) o estar plantado es quedarse allí mismo donde los pies tocan el suelo. Así igual una planta (vegetal) que echa raíces y queda en un mismo lado." (8) Curiosamente en algunas idiomas non-indoeuropeas la palabra empleada tiene una etimología diametralmente opuesta. En húngaro “növény” tiene raíz en el verbo “crecer”, la palabra estándar por “planta” significa pues literalmente “lo que crece”. En árabe ocurre algo parecido; la palabra “naba:t” estando derivado del verbo “alejarse”. Creo que el valor simbólico de la planta como tal reside en estas significados, expresando "el nacimiento perpetuo, el flujo incesante de la vida" (9). Aunque hoy en día conocemos todos los pasos moleculares del fotosíntesis, nos debe seguir maravillando el proceso que convierte luz y aire en materia viva, fundamento imprescindible de todo lo demás seres en la tierra. Proyectando estas ideas sobre nuestra placa visigoda, no creo pues demasiado excesivo identificar a los cuatro hojas con el mundo material en su totalidad.

Y ahora llegamos a los cuatro “astas” o “estrellas” entre las hojas. Yo veo en ellos simplemente cuatro “x”-es, es decir cuatro puntos geométricos con la indicación de la conexión entre si y con las paredes del marco. Si dibujamos mentalmente las líneas así indicadas tenemos un cuadrado, que justamente tiene el circulo central inscrito y está girado 45 grados en relación con el cuadrado del marco exterior. Pero que es esto y para que? – preguntará posiblemente mi lector paciente, que todavía sigue el texto. Se trata de nada menos que un símbolo de el hombre! Vamos a ver porque.

Los cuatro “x”-es están dispersos entre las plantas, es decir en el campo de la materia. Plantado en el mundo material pero solo teniendo otorgado una manchita de tiempo, el ser humano es bien efímero, igual que puntos en el espacio que no tienen ni altura ni anchura solo ubicación, en las matemáticas se habla de objetos 0-dimensionales. Presencia real solo cobra la figura de los cuatro puntos si se conectan entre si – alrededor del circulo; es decir la existencia del humano es solamente real si se fundamenta en lo divino/absoluto. Además las líneas cruzadas que forman los cuatro puntos tienen paralelo evidente con las palomas cruzadas en el centro, la esencia divina.

Tal es pues mi interpretación de la placa estampada de Córdoba, la segunda de mis textos subjetivos sobre la Cultura del reino visigodo hispánico. El primero era esa. En la siguiente entrega cambiaré la comarca a Toledo para presentar mi punto de vista a uno de los destacados miembros del tesoro de Guarrazar.
Referencias


(1) No. de Inventario: CE003970 en el Museo Arqueológico de Córdoba. La ficha técnica entera sale como la cuarta buscando a “placa decorada” en el campo “Objeto” aquí (primero hay q darle a "Acceder al buscador domus »")




(3) Enrique Romero de Torres: «Nuevos descubrimientos arqueológicos en la provincia de Córdoba», Boletín de la Real Academia de la Historia, LXXXIV, pp. 135-140, Madrid 1919




(5) Béla Hamvas, ensayista húngaro, citado libremente de memoria.


(6) Lo del símbolo de la PAZ como tal ha sido introducido solamente en el siglo XX; según Aquilino Duque inventado por Picasso (El Suicidio de l Modernidad).








domingo, 3 de octubre de 2010

Carreras entre granates – El Circo Romano de Toledo

Siendo el monumento visitable mas antiguo de la ciudad, las ruinas semi(des)enterradas del circo romano en Toledo son muy dignas de atención.

Lo primero que choca es su tamaño descomunal: 400 metros de largo! Es la distancia que hay desde la Puerta del Sol hasta la Plaza Mayor; luego el diámetro del Toledo intramuros entero no supera 3-3½ veces el largo del circo! No se decir si tales proporciones indican la importancia del Toledo romano o simplemente el peso del espectáculo como tal en cualquier ciudad romana de la época…
Mi segundo comentario es respeto a la forma de la edificación. Hoy en día la palabra “circo” se asocia con la tienda redonda donde actúan trapecistas, animales y payasos (no, no se trata de política...) lo que puede conducir a imaginar el circo romano parecido a un plaza de toros; la curvatura de las ruinas nada mas entrar en el parque arqueológico desde la Avenida de la Reconquista también dirige hacia esta idea. Pero no; la forma del circo romano es más bien como un rectángulo muy alargado, donde las lados cortos están curvos, y el de Toletvm no era ningún excepción. La entrada detrás del parque infantil, coincide justamente con uno de esas laditos curvos. (con una anchura total de aprox. 100 metros)

El material de los restos es hormigón – si, ya se empleaba hace casi 2000 años! Las estructuras actualmente visibles formaban el esqueleto de la edificación; teniendo por encima construcciones adicionales de otras materias (ladrillo? madera?) Pero quedándonos con lo que vemos, el hormigón aquí esta constituido de piedras con un diámetro de 10-20 cm, incrustados en cemento. Buscando roturas frescas me parece que las piedras empleadas son idénticas a la roca madre expuesta por ejemplo debajo de la Puente de San Martín, es decir un roca magmática->metamórfica manchado por cristales de granates. (anfibolita?) Considerando la cercanía, parece lógico que trajeran las piedras para la obra desde allí; me imagino que abundaban las bloques de esa materia dispersas en toda la zona, era entonces solamente un cuestión de machacarlos un tanto y alá, al hormigón para el circo.
El granate es un mineral semiprecioso que no es nada raro en anfibolitas. Su color típico varía desde marrón al burdeo-rojo, los ejemplares de cierta intensidad utilizándose en orfebrería. Seguro no estoy, pero tampoco lo veo imposible que algunos granates en joyas antiguas de los talleres toledanos (romanos, visigodos) tienen entonces una procedencia local.

Con el paso del tiempo el superficie de las rocas va cobrando una patina de líquenes y musgos; ambos organismos son sumamente selectivos al sustrato. En nuestro caso del hormigón romano esto se traduce en unos especies encima de las partes con cemento y completamente otros especies encima de las piezas de roca incrustada. Como se ve en la última foto, el resultado es una textura tipo de leopardo, con las manchas de verde clarito entre un reticulo oscuro
.

Los tres fotos han sido tomadas anteayer al atardecer, un día esplendido de veranillo de san Miguel.




domingo, 19 de septiembre de 2010

Dos Texturas Toledanas / Two Textures from Toledo


1. La huella vertical dejada por una casa desaparecida (textura creada por sustracción).
2. Detalle de la Puerta del Cambrón (textura creada por adición).
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1. The vertical fingerprint of a long gone house (texture created by subtraction).
2. Detail of the city-gate "Puerta del Cambrón" (texture created by addition)
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jueves, 9 de septiembre de 2010

El surgimiento de la escritura hace >5000 años - Perspectivas Peregrinas


A propósito de esta entrada ayer en “Antigua y Medieval” quisiera reflejar un poco sobre el asunto del surgimiento de la escritura.

Resumiendo la esencia del articulo: La escritura se invento primera vez en la humanidad algo antes de 3200 a.C. en Mesopotamia; siendo el suceso estrechamente vinculado con el surgimiento de la administración y la economía del Estado. Luego lo mismo ocurrió independientemente pero por razones idénticas en Egipto y más tarde aún en China. Los primeros textos con fines no administrativos, sino digamos estéticos y creativos, proceden de varios siglos más tarde. En el articulo citan un suposición, que esto es debido a la necesidad de signos mas complejos; pero claro eso ya es especulación. El hecho puro y duro es que no se ha desarrollado escritura antes de desarrollarse las ciudades estados - por lo menos así es evidenciado por la arqueología, y elijo ahora no dudar en ello.

Tengo que confesar que llevo años dando vueltas a esta casuística, no digo todos los días pero el tema me invade regularmente en momentos repentinos, como esperando al cambio del semáforo o fregando platos; imaginándome debates tipo:

- Los funcionarios y los empresarios gritan aleluya cuando ven que su oficio es el precursor indispensable de la escritura, luego evidentemente tiene que ser superior a la literatura, poesía y semejante culturota inútil.

- A los humanistas, felizmente empleados en sus universidades, les entran unos instantes de inquietud existencial, pero contestan pronto y tranquilamente: visto como la escritura creativa es posterior al pragmático, refleja evidentemente un nivel superior en la evolución cultural, otorgando a ellos (los académicos) estatus de aristocracia del espíritu.

- Mientras tanto los amigos artistas aparentan pasar olímpicamente, pero si que sienten un ligero fastidio de fondo… etc.

Dejando de lado esta pseudo-dialogo ficticio; permítanme dar otras vueltas alrededor del tema.
Es casi una trivialidad, pero tratándose de asuntos tan remotas creo que debemos recordar la importancia de NO poner ecuaciones:

1) entre lenguaje y escritura;
2) entre lenguaje/escritura y cultura

Empezando por lo primero, había segurísimamente una tradición oral miles de años antes de la invención de la escritura; sobre lo cual prácticamente no sabemos nada de nada.

Grabar palabras en arcilla en lugar de la mente fue una idea con consecuencias inmensas tanto para manejar datos como para transmitir ideas; pero no debemos olvidar que la simple memorización también emplea esas funciones – a su modo! Cuando la organización social en las ciudades estados llegaba a un cierto nivel de complejidad, ya no bastaba el cerebro para manejar los datos –cuantitativamente y probablemente legalmente, por lo que se fijaban en arcilla. El hecho de no emplear la escritura durante varios siglos para la no-administración puede interpretarse como insuficiencia de medios (como se hace en el articulo) pero también como un insistir en la importancia de transmitir conocimientos de persona a persona – ya que el saber factual en si nunca basta, hay que edificar algo mas en la mente del aprendiz. No se y nunca vamos a saber si fue por eso el retraso de la escritura por otras fines que contar vacas y sacos, pero tampoco se puede descartar tal perspectiva.

Pasando al segundo no-ecuación; la palabra “cultura” tiene dos significados que han venido a ser distintas. Por un lado tenemos a cultura como algo "elevado" o de ocio; en el suplemento cultural de los periódicos tratándose de literatura, cine, música, exhibiciones de arte etc. Luego tenemos cultura en el sentido civilización, como en expresiones “cultura occidental contemporánea” o “cultura maya”. Tal como esta el mundo hoy en 2010, el primer sentido de “cultura” puede existir perfectamente sin palabras, el segundo de ninguna manera.
Probablemente en el cuarto milenio antes de Cristo estas dos sentidos de la palabra “cultura” no estaban tan diferenciados: las imágenes pintadas eran siempre más que adornos, la música y el baile no era mero pasatiempo etc. No es impensable que el lenguaje (de las palabras) no jugaba un papel tan dominante en las culturas humanas antes del dicho milenio, o su papel era totalmente distinto.

Repito que por razones obvias, nunca vamos a encontrar huellas del curso del desarrollo del lenguaje hablado en épocas tan remotas, pero tengo dos pistas indirectas.
Según Ibn Jaldún, genio Tunecino del siglo XIV d.C., entre otras cosas el padre de la filosofía histórica y de la sociología, los pueblos nómadas cuidan su idioma con mucho mas esmero que los pueblos sedentarios; una observación curiosa...
La segunda pista lo saco del ámbito de la pintura, si no recuerdo mal lo he visto expresado por la paleoetnologa Pia Laviosa Zambotti: Hablando del arte de los cazadores paleolíticos, sobre todo los procedentes de las cuevas de Altamira y Languedoc hace notar que estas pinturas de hace varios 10 mil años son de un naturalismo y expresividad que luego se pierde en el neolítico, y solo se vuelve a ver bien entrando en épocas históricas. Es decir algunos cazadores tenían un capacidad de observación y representación que ninguna de los agricultores poseían.

Obviamente los mecanismos indicados por estas dos pistas no se pueden transmitir directamene al nuestro tema (el lenguaje hablado en tiempos muy remotos); pero indican que el desarrollo material no necesariamente conlleva mejora en los medios de expresión...

Pido disculpas de mi estimado lector si le he dejado con más preguntas que antes de concederme su tiempo, y además con toda mi jeta no dejare hoy ninguna conclusión en este textito. Solamente como un especie de nota al pie creo que la invención y desarrollo de la escritura es un buen ejemplo donde la mirada del tiempo no puede ser meramente lineal. (véase mi entrada anterior, Marbella Omeya)

domingo, 8 de agosto de 2010

RONDA, Puerta de Almocábar





RONDA, torre de san Sebastian



El dintel encima de la puerta es muy parecido al que esta encima de la puerta mudejar en el antiguo convento Madre de Dios en Toledo; aqui solo ha quedado dos teslas de la ceramica incrustada, pero es suficiente para mostrar que hasta la coloración era parecida (turquesa clara). El edificio toledano es mudejar, el alminar de Ronda ha sido edificado en un ambiente islamico, pero claramente los dos salen de la misma tradicion artesanal.

El parte superior del torre es mudejar, su edificacion sera varios siglos posterior al base. Es curioso el patron formado por tener algunas ladrillos en posicion vertical; no me suena haber visto este tecnica en el mudejar toledano.










Marbella amenazada - Corrales Bajos













sábado, 7 de agosto de 2010

MARBELLA OMEYA - El tiempo visto como conglomerado

Como la entrada anterior, esta también se dedica a Marbella – a mi manera…

A pocos pasos de la Plaza de los Naranjos (donde el ayuntamiento) se llega a restos de un alcazaba adscrita a época califal (siglo X). Creo que fuerea de la Mezquita de Córdoba queda poca cosa del califato Omeya en España; ya por ese motivo el lugar es digno de mención!
Todas las fotos han sido tomadas en la calle Trinidad; donde el lienzo del muro parece ser lo más largo y completo.

La primera imagen es una vista general de la pared en dicha calle con una serie de agujeros cuadrados en la altura de la cuarta nivel de de sillares; probablemente eran para sujetar vigas. Notase también la base de la pared, una capa de canto rodado (debajo de todo, en la sombra). El siguiente foto sirve para que se vea bien el tamaño potente de los sillares; el panoli con la camiseta amarilla hace de referencia.
Pasemos ahora a la materia de lo cual esta construido el muro: una roca llamado conglomerado. En un matriz heterogéneo de caliza tenemos encrestadas piedras volcánicas de diferente tamaño; luego la caliza también contiene fósiles en cantidades variables, sobre todo conchas. Es esta composición que se muestra en la tercera foto; a la derecha del centro hay una piedra volcánica, y un poco más a la derecha aun se asoma una concha. Por supuesto lo que sale exactamente en el superficie cambia según avanza el desgaste del sillar. Por cierto, si no recuerdo mal las paredes exteriores de la antes mencionada gran mezquita están labradas de una materia parecida a este.
En foto 4 y 5 muestro los tres capiteles romanos (jonicos) empotrados en el muro. La presencia de estos elementos repite la idea del conglomerado en otra dimensión: igual que las piedras volcánicas se formaron y pulieron en un ambiente totalmente diferente antes de acabar en la masa de caliza; estos tres capiteles fueron reutilizados por albañiles casi un milenio después de su labra. Obviamente están totalmente descontextualizados, hasta el punto de que a uno de los tres le han dado la vuelta en su nueva ubicación.
No puedo evitar un ligero digresión a Toledo, antigua capital del reino visigodo, cuyos edificios han desaparecido sin excepción, pero cientos de piedras visigodas se encuentran ahora empotradas en edificios. En algún momento dedicare una entrada entera a este tema, por ahora solo quiero mencionar uno de los más espectaculares tanto de labra como de contexto: el nicho empotrado en la torre mudéjar de Santo Tomé; situado bastante alto, por lo que recomiendo llevar prismáticos para disfrutar sus detalles.

Volviendo a a la calle Trinidad en Marbella: A parte de formar fichas en el lienzo del muro, cada sillar es una pieza individual. Su tamaño, forma, contexto y mantenimiento es obra humana; sus materias, el color y la textura de la superficie son productos de procesos naturales; es decir geológicos para la formación de la roca misma, rematados por las fuerzas de erosión. En términos de duración estas diferentes componentes de formación eran muy desiguales, no obstante “colaboraron” estéticamente en crear una impresión visual “unitaria”, luego totalmente diferente para cada sillar. Estas son las ideas que intento ilustrar con la última foto.

Una manera popular de visualizar el paso del tiempo son los anillos de crecimiento en secciones de madera. En mi opinión es una imagen engañosa, y nuestro muro Omeya es un modelo mucho más exacto... vamos a ver porque.A primera vista el tiempo es un largo continuo, donde la secuencia de los eventos es algo fundamental. Es este aspecto que se subraya viendo las capas de crecimiento en la madera. Pero como “idea polizón” entra también lo de contacto exclusivo con el anillo anterior y posterior (i.e. pasado y presente inmediato y nada más), luego la idea del desarrollo continuo. Aunque estos conceptos tengan cierta validez en el mundo empresarial, creo que son bastante limitadoras en otros ámbitos; algún día seguiré la reflexión en ese dirección si se me permiten mis circunstancias…
Otra posible forma de ilustrar el tiempo es como una sopa espesa y compleja donde elementos (eventos, actores…) de diferentes partes entran en contacto permanentemente, creando nuevos contextos. Nuestra vida individual y colectiva es una mezcla tremenda de múltiples fuentes, tanto en el nivel material como respeto a la idioma, los conceptos y las ideas que en conjunto forman nuestra conciencia y nuestra civilización. El muro Omeya de conglomerado con capiteles romanas empotradas capta para mi esta visión del tiempo.

Literatura: Alejandro Pérez-Malumbres Landa: Reflexiones sobre el Patrimonio Arqueológico de Marbella. En: "I Jornadas Patrimonio Historico Local Marbella; Cilniana, 1999" ISBN: 84-607-1251-6

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Marbella Desconocida - puerta en Pza del Ejido 1


Teniendo una famosa americana + hija paseando por sus calles estos días, se añaden nuevas pinceladas glamourosas al imagen de Marbella, suscitando fascinación o fastidio, según... Pero bueno, tanto brillo o falta del mismo (según...) en la prensa no debe provocarnos daltonismo: el casco antiguo de la ciudad es realmente una joya, por lo que le dedicare aquí algunas entradas.






En cualquier ciudad antigua es una buena estrategia recorrer sistemáticamente todas las calles en la región de la mapa donde parecen mas estrechitas y caóticas. En el caso de Marbella el jackpot me caía en una placita enana llamada “plaza del Ejido” (en algunas mapas con “g”), donde el portal del numero 1 es uno de los mas impresionantes puertas de madera tallada que he visto nunca. Es relativamente pequeña pero intima y lleno de detalles originales y bellísimos – por lo demás, que hablen las imágenes! (pinchad para ampliar la foto)


La casa parece ser de un particular, por lo que no querría molestar demasiado con preguntas; luego mis rápidos intentos de buscar info han sido en vano hasta ahora, pero la puerta tiene pinta de muchos cientos de años y afortunadamente restaurada con esmero. Agradezco cualquier pista para datarla y/o contextualizarla.


martes, 20 de julio de 2010

MENADE en entalle romana de pasta vítrea, siglo I a.C. (la belleza de la descomposición estructurada (3))




“La pieza ha sido obtenida partiendo de una matriz en hueco-grabado que dío una pasta tipo camafeo. El tema es helenístico y la matriz de la que fue sacada tuvo que ser de una gran belleza y calidad.” (R. Casal, ref abajo)



La matriz esta perdida; es un especie de milagro que este motivo nos ha llegado – aunque un tanto “disuelta”. El foto que sirvió de partida para mi dibujo irradia fuerte descomposición, dándole un aire de decadencia desagradable. Reproduciendolo con lapiz intenté suavisar tal efecto; espero haber devuelto un poco más de la gracia origial del menade.


Debemos recordar que el vidrio no es en absoluto una materia hecha para la eternidad. Faltándole una estructura cristalina interna, es un especie de liquido – solo que fluye muy lentamente. (Ventanas en iglesias muy antiguas pueden ser mas gruesos por debajo que por arriba…)


La obra ha sido la matriz; el cachito este de pasta vítrea amarilla de apenas tres centímetros es casi como las olas concentricas dejadas en el superficie del agua tras una piedra tirada - pero aquí esta!


Forma oval. Medidias: 2,9 x 1,6 x 0,35 cm


Número de Inventario 17


Museo Arqueológico Nacional, Madrid


Foto Nr. 125 en “Colección de Gliptica del MAN (serie de entalles romanos) por Raquel Casal García. ISBN 84-7483-657-3)


ref citado: J.M. Luzón Nogué, Die Neuattischen Rund-Aren von Italica, Madrider Mitteilungen, 19, 1978, 272 y ss.

La Carcoma de G. Perec (la belleza de la descomposición estructurada (2))

A continuación viene mi párrafo preferido de Georges Perec.


La contextualización estará en otras entradas tituladas “la belleza de la descomposición estructurada



“El segundo objeto era más extraño todavía. Cuando Grifalconi lo sacó de su caja acolchada, Valène empezó creyendo que se trataba de un ramo de coral. Pero Grifalconi meneó negativamente la cabeza : en el desván del palacio de la Muette había encontrado los vestigios de una mesa : el tablero oval, maravillosamente incrustado de nácar, se hallaba en un estado de conservación notable, pero el pie central, una pesada columna fusiforme de madera jaspeada, resultó completamente carcomido ; la acción de la carcoma había sido subterránea, interior, formando innumerables canales y canalillos llenos de madera pulverizada. Por fuera no se advertía aquella labor de zapa, Grifalconi vio que no se podía conservar el pie original, que, casi vacío, era absolutamente incapaz de sostener el peso del tablero, si no se reforzaba interiormente; por consiguiente, después de extraer por aspiración toda la madera carcomida de los conductos, inyectó en ellos una mezcla casi líquida de plomo, alumbre y fibras de amianto. La operación salió bien, pero enseguida se vio que, aún consolidado de aquel modo, el pie seguía siendo demasiado frágil, y Grifalconi hubo de decidirse a sustituirlo por otro. Fue entonces cuando se le ocurrió la idea de disolver la madera que quedaba, con lo que se hizo visible aquella arborescencia fantástica, representación exacta de lo que había sido la vida del gusano en el interior de aquel fragmento de madera, superposición inmóvil, mineral, de cuantos movimientos habían constituido su existencia ciega, aquella obstinación única, aquel itinerario pertinaz, aquella materialización fiel de cuanto había comido y digerido, arrancando de la compacidad del mundo circundante los imperceptibles elementos necesarios para sus supervivencia ; imagen desnuda, visible, inconmesurablemente turbadora de aquel caminar sin fin, que había reducido la madera más dura a una red impalpable de galerías pulvurentas.”



(Georges Perec; La vida instrucciones de uso, Cap. XXVII; Anagrama/ Circulo de Lecores p 154, trad. Josep Escué)

miércoles, 14 de julio de 2010

La Mirada Visigoda – Frescor en la Tradición



Cultura del reino visigodo hispánico (1)
- restos en la mezquita de Córdoba -


El pueblo visigodo tuvo suma importancia política en la antigüedad tardía. Fueron los primeros en saquear Roma; luego colaboraron con los “ex-saqueados” en parar la horda devastador de los hunos; finalmente fundaron un reino floreciente en la península ibérica. A lo largo de pocos siglos ese pueblo de origen germánico, bárbaro y nómada se convirtió en el más destacado portador de la cultura clásica en su época, junto con Bizancio y lo que quedaba de Roma. En el proceso cambiaron su idioma por el latín y su religión oficial hasta dos veces. La apasionante enfoque “época de transición” se acentúa más aun si recordemos que los aprox. dos siglos pasados entre su toma de poder en Hispania (año 497) y la eliminación del mismo por la invasión árabe en 711 coincide con nuestro umbral europeo entre antigüedad y edad media.

Mi primer contacto con este pueblo fue iniciado por atracción hacia sus formas artísticas. La particular expresividad con que la decoración hispanovisigoda reinterpreta los clásicos motivos romanos representa para mi un ejemplo brillante de innovación sin salir de la tradición. Empezando con el fotito de mi perfil (en la columna izquierda del blog en "datos personales") estoy de cuclillas al lado del altar de la basílica de San Vicente, ahora un pequeño museo en un rincón de la catedral-mezquita de Córdoba. La decoración es sencillísimo, hecho con pocas trazos con compás, no obstante el resultado es impactante. En principio no tiene nada que no podría ser romano, pero claramente no lo es.

Quedándonos en la mezquita, todos los capiteles de la parte primitiva de Abd al-Rahman I son reutilizados, por lo que son todos romanos o visigodos. El capitel del primer foto me parece romano; los siguientes dos visigodos. Observemos como se mantiene el modelo del capitel corintio, pero con un sabor mucho mas fresco, casi juvenil. (pinchando los imágenes se hacen granes; merece la pena contemplarlos todos un rato). Curiosamente los capiteles corintios hechos en el siglo XVIII-XIX delante de edificios públicos de prestigio à la cortes y museos siguen normalmente el estilo romano; como si el visigodo fuese demasiado moderno – aunque su edad también tira a milenio y medio!



Los últimos tres fotos son también del museo San Vicente, igual que el altar. En el siguiente imagen tenemos arriba un sarcófago romano; abajo tres placas visigodas. Los dos laterales son ladrillos estampados; el del medio es el fragmento de un nicho con parte inferior de crismón. Lo curiosísimo es que la piedra esta cincellada con inspiración de la orfebrería: las dos letras (alfa y omega) están colgando de cadenas, y el superficie de los grandes "X" y "R" yuxtapuestas tiene rombos, cuadrados y circulitos como si de metal fueran; un testimonio de la transición de un pueblo nómada al sedentarismo, que transmite motivos de sus materias conocidas a las nuevas. (idea de Palol, ya lo he tocado en una entrada anterior sobre “Tesoros del Mundo”). El sarcófago lo he dejado en la foto para contrastar con la ausencia casi completa de representaciones humanas en el arte visigodo.

La placa de piedra labrada en el siguiente imagen muestra un diseño original de decoración floral, hecho con trazos fuertes y densas pero manteniendo el sentido del equilibrio. Finalmente tenemos otro placa estampada de arcilla con crismón central. Un composición atrevida completamente asimétrica. En mi opinión los motivos en estas piezas también tienen pinta de haber sido pasados a piedra desde materiales transportables. La composición floral me hace asociar a textil o cuero, el estampado tiene un aire de pedrería incrustada.


Resumiendo lo visto y dicho: En la mezquita de Córdoba se encuentran piezas esplendidas de labra visigoda procedentes de la basílica San Vicente; bien reutilizadas en el edificio actual, bien expuestas en un rincón llamado “museo san Vicente”. El estilo artístico reflejado en estas obras de piedra es un continuación de lo romano pero impregnado con la visión y costumbres de un pueblo que solo lleva asentado desde hace pocas generaciones, la huella refrescante del genio visigodo.

Todas las fotos son de László Béla Kovács, 2009.


Literatura:
Jose Orlandis: Historia del Reino Visigodo Español (Rialp 2006)
Pedro de Palol: Arte Hispanico de la Epoca Visigoda (Polígrafa 1968)