Stratigraphy of SPAIN and beyond - history, monuments, ideas, arts & crafts

martes, 20 de julio de 2010

MENADE en entalle romana de pasta vítrea, siglo I a.C. (la belleza de la descomposición estructurada (3))




“La pieza ha sido obtenida partiendo de una matriz en hueco-grabado que dío una pasta tipo camafeo. El tema es helenístico y la matriz de la que fue sacada tuvo que ser de una gran belleza y calidad.” (R. Casal, ref abajo)



La matriz esta perdida; es un especie de milagro que este motivo nos ha llegado – aunque un tanto “disuelta”. El foto que sirvió de partida para mi dibujo irradia fuerte descomposición, dándole un aire de decadencia desagradable. Reproduciendolo con lapiz intenté suavisar tal efecto; espero haber devuelto un poco más de la gracia origial del menade.


Debemos recordar que el vidrio no es en absoluto una materia hecha para la eternidad. Faltándole una estructura cristalina interna, es un especie de liquido – solo que fluye muy lentamente. (Ventanas en iglesias muy antiguas pueden ser mas gruesos por debajo que por arriba…)


La obra ha sido la matriz; el cachito este de pasta vítrea amarilla de apenas tres centímetros es casi como las olas concentricas dejadas en el superficie del agua tras una piedra tirada - pero aquí esta!


Forma oval. Medidias: 2,9 x 1,6 x 0,35 cm


Número de Inventario 17


Museo Arqueológico Nacional, Madrid


Foto Nr. 125 en “Colección de Gliptica del MAN (serie de entalles romanos) por Raquel Casal García. ISBN 84-7483-657-3)


ref citado: J.M. Luzón Nogué, Die Neuattischen Rund-Aren von Italica, Madrider Mitteilungen, 19, 1978, 272 y ss.

La Carcoma de G. Perec (la belleza de la descomposición estructurada (2))

A continuación viene mi párrafo preferido de Georges Perec.


La contextualización estará en otras entradas tituladas “la belleza de la descomposición estructurada



“El segundo objeto era más extraño todavía. Cuando Grifalconi lo sacó de su caja acolchada, Valène empezó creyendo que se trataba de un ramo de coral. Pero Grifalconi meneó negativamente la cabeza : en el desván del palacio de la Muette había encontrado los vestigios de una mesa : el tablero oval, maravillosamente incrustado de nácar, se hallaba en un estado de conservación notable, pero el pie central, una pesada columna fusiforme de madera jaspeada, resultó completamente carcomido ; la acción de la carcoma había sido subterránea, interior, formando innumerables canales y canalillos llenos de madera pulverizada. Por fuera no se advertía aquella labor de zapa, Grifalconi vio que no se podía conservar el pie original, que, casi vacío, era absolutamente incapaz de sostener el peso del tablero, si no se reforzaba interiormente; por consiguiente, después de extraer por aspiración toda la madera carcomida de los conductos, inyectó en ellos una mezcla casi líquida de plomo, alumbre y fibras de amianto. La operación salió bien, pero enseguida se vio que, aún consolidado de aquel modo, el pie seguía siendo demasiado frágil, y Grifalconi hubo de decidirse a sustituirlo por otro. Fue entonces cuando se le ocurrió la idea de disolver la madera que quedaba, con lo que se hizo visible aquella arborescencia fantástica, representación exacta de lo que había sido la vida del gusano en el interior de aquel fragmento de madera, superposición inmóvil, mineral, de cuantos movimientos habían constituido su existencia ciega, aquella obstinación única, aquel itinerario pertinaz, aquella materialización fiel de cuanto había comido y digerido, arrancando de la compacidad del mundo circundante los imperceptibles elementos necesarios para sus supervivencia ; imagen desnuda, visible, inconmesurablemente turbadora de aquel caminar sin fin, que había reducido la madera más dura a una red impalpable de galerías pulvurentas.”



(Georges Perec; La vida instrucciones de uso, Cap. XXVII; Anagrama/ Circulo de Lecores p 154, trad. Josep Escué)

miércoles, 14 de julio de 2010

La Mirada Visigoda – Frescor en la Tradición



Cultura del reino visigodo hispánico (1)
- restos en la mezquita de Córdoba -


El pueblo visigodo tuvo suma importancia política en la antigüedad tardía. Fueron los primeros en saquear Roma; luego colaboraron con los “ex-saqueados” en parar la horda devastador de los hunos; finalmente fundaron un reino floreciente en la península ibérica. A lo largo de pocos siglos ese pueblo de origen germánico, bárbaro y nómada se convirtió en el más destacado portador de la cultura clásica en su época, junto con Bizancio y lo que quedaba de Roma. En el proceso cambiaron su idioma por el latín y su religión oficial hasta dos veces. La apasionante enfoque “época de transición” se acentúa más aun si recordemos que los aprox. dos siglos pasados entre su toma de poder en Hispania (año 497) y la eliminación del mismo por la invasión árabe en 711 coincide con nuestro umbral europeo entre antigüedad y edad media.

Mi primer contacto con este pueblo fue iniciado por atracción hacia sus formas artísticas. La particular expresividad con que la decoración hispanovisigoda reinterpreta los clásicos motivos romanos representa para mi un ejemplo brillante de innovación sin salir de la tradición. Empezando con el fotito de mi perfil (en la columna izquierda del blog en "datos personales") estoy de cuclillas al lado del altar de la basílica de San Vicente, ahora un pequeño museo en un rincón de la catedral-mezquita de Córdoba. La decoración es sencillísimo, hecho con pocas trazos con compás, no obstante el resultado es impactante. En principio no tiene nada que no podría ser romano, pero claramente no lo es.

Quedándonos en la mezquita, todos los capiteles de la parte primitiva de Abd al-Rahman I son reutilizados, por lo que son todos romanos o visigodos. El capitel del primer foto me parece romano; los siguientes dos visigodos. Observemos como se mantiene el modelo del capitel corintio, pero con un sabor mucho mas fresco, casi juvenil. (pinchando los imágenes se hacen granes; merece la pena contemplarlos todos un rato). Curiosamente los capiteles corintios hechos en el siglo XVIII-XIX delante de edificios públicos de prestigio à la cortes y museos siguen normalmente el estilo romano; como si el visigodo fuese demasiado moderno – aunque su edad también tira a milenio y medio!



Los últimos tres fotos son también del museo San Vicente, igual que el altar. En el siguiente imagen tenemos arriba un sarcófago romano; abajo tres placas visigodas. Los dos laterales son ladrillos estampados; el del medio es el fragmento de un nicho con parte inferior de crismón. Lo curiosísimo es que la piedra esta cincellada con inspiración de la orfebrería: las dos letras (alfa y omega) están colgando de cadenas, y el superficie de los grandes "X" y "R" yuxtapuestas tiene rombos, cuadrados y circulitos como si de metal fueran; un testimonio de la transición de un pueblo nómada al sedentarismo, que transmite motivos de sus materias conocidas a las nuevas. (idea de Palol, ya lo he tocado en una entrada anterior sobre “Tesoros del Mundo”). El sarcófago lo he dejado en la foto para contrastar con la ausencia casi completa de representaciones humanas en el arte visigodo.

La placa de piedra labrada en el siguiente imagen muestra un diseño original de decoración floral, hecho con trazos fuertes y densas pero manteniendo el sentido del equilibrio. Finalmente tenemos otro placa estampada de arcilla con crismón central. Un composición atrevida completamente asimétrica. En mi opinión los motivos en estas piezas también tienen pinta de haber sido pasados a piedra desde materiales transportables. La composición floral me hace asociar a textil o cuero, el estampado tiene un aire de pedrería incrustada.


Resumiendo lo visto y dicho: En la mezquita de Córdoba se encuentran piezas esplendidas de labra visigoda procedentes de la basílica San Vicente; bien reutilizadas en el edificio actual, bien expuestas en un rincón llamado “museo san Vicente”. El estilo artístico reflejado en estas obras de piedra es un continuación de lo romano pero impregnado con la visión y costumbres de un pueblo que solo lleva asentado desde hace pocas generaciones, la huella refrescante del genio visigodo.

Todas las fotos son de László Béla Kovács, 2009.


Literatura:
Jose Orlandis: Historia del Reino Visigodo Español (Rialp 2006)
Pedro de Palol: Arte Hispanico de la Epoca Visigoda (Polígrafa 1968)

martes, 6 de julio de 2010

Subiendo a la Puerta del Sol (Toledo)



Cuando estuve en Toledo en marzo, para gran alegría mía he encontrado abierto a una puertita dentro de la Puerta del Sol, con una escalera estrecha y empinadísima detrás – se podía subir!

Tras el primer tramo de la escalera (en sí una experiencia!) se llega a un espacio peculiar, compuesto de varias bóvedas. Hay un cartel de foto prohibido, así que solo he sacado este desde un ángulo torcido. (igual el cartel solo se refiere a la pequeña exposición que hay en la sala esa, pero normalmente prefiero no preguntar por detalles ante una prohibición de tal índole)


Un segundo tramo de escalera conduce al "tejado", un sitio absolutamente agradable; dividido en varios secciones. Salen un pelín de hierbajos en las rincones y los ladrillos están bien cubiertos de líquenes; cosas que acaso se cualifica de descuido, pero según mi humilde juicio es perfecto que se note un poco el tiempo en las superficies de monumentos antiguos. (Los paredes de San Juan de los Reyes por ejemplo han quedado como un pastel con la ultima limpieza histérica)


Entre las vistas esplendidas destaca el del Cristo de la Luz desde arriba (!) metido entre ramas de árboles (por lo que no he conseguido un foto pasable), y un buen tramo de las murallas con la puerta de Valmardón en primer plano.


Ver las entrañas de los monumentos antiguos mas la contemplación de un espacio conocido desde nuevos ángulos, como con la ocasión que aquí me ha brindado, es maravilloso! Una pena que la mayoría de las torres mudéjares de la ciudad no son más accesibles.


Ps1: la vista frontal de la puerta desde el suelo abunda ya en el Internet, por lo que no lo reproduzco aquí; pero recomiendo los del blog de Eduardo Butragueño (aqui) (por cierto el mejor blog que existe sobre Toledo)


Ps2: El primer foto en la entrada esta tomado desde el jardín que rodea a la Ermita del Cristo de la luz (de lo cuál la mitad una vez fue mezquita, quizás llamado el de "Bab al-Mardum")

sábado, 3 de julio de 2010

The beauty of GRAVITY upside down / La belleza de la gravedad al revés



Watching gravity and human creativity working hand in hand…


Also it is a joy to see how the old masters inspire our generation.


Absolute respect for the entire team who let this happen, including the documentation stuff. Thanks a lot Marcsi for drawing my attention to this superb video!




Gaudi Stool Film from Studio Geenen on Vimeo.